Históricamente, el principal residuo contaminante potencial en el LPG ha sido el aceite lubricante recogido de los compresores durante su fabricación. El rango de ebullición de este tipo de contaminante es lo suficientemente alto como para ser detectado por técnicas de análisis gravimétricos.
Con la introducción de los procesos de tratamiento basados en aminas, los productos de tratamiento tales como el DIPA, se presentan también como potenciales residuos contaminantes. Son más volátiles que los lubricantes y por ello se pierden cantidades muy significativas durante los procesos de evaporación y secado en los métodos de ensayo gravimétricos.
El DIPA en el LPG tiene el mismo efecto en los motores de automóviles que el residuo aceitoso. Se deposita en las membranas y filtros y produce un inesperado elevado mantenimiento o la paralización del vehículo.
En la siguiente nota de aplicación encontrará una descripción detallada de la solución desarrollada por DVLS para el análisis de DIPA en LPG. Los resultados analíticos demuestran que se trata de un método seguro, rápido y preciso un límite de detección inferior muy por debajo de 1 ppm.
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